Hace algunos días vengo revisando el tema de la blockchain, sus aplicaciones, sus fundamentos técnicos a nivel general y el impacto que este desarrollo criptográfico puede tener en muchas industrias. Particularmente, me ha llamado mucho la atención la implementación de la cadena de bloques de la red Ethereum y la plataforma que la acompaña.
La red Ethereum es una red entre pares, que funciona de manera descentralizada, donde cada nodo guarda una copia de la base de datos, que se sincroniza cada vez que esta cambia (ej: cuando se crea un nuevo eslabón en la cadena):
imagen tomada de: https://es.vecteezy.com/
Me ha sorprendido la forma en que funciona la cadena de bloques y la capacidad que se tiene en Ethereum para escribir contratos inteligentes, soportados en la red de blockchain.
La ejecución de los mismos se da de manera autónoma y descentralizada, sin requerir de una tercera parte que dirima un posible conflicto, basándose exclusivamente en que se cumplan las condiciones establecidas en el contrato, entregando a cada parte, lo que le corresponda de acuerdo a como este estipulado en las clausulas del mismo.
Si trasladamos esto al mundo de las negociaciones OTC (over the counter, por sus siglas en ingles), los contratos inteligentes serían un mecanismo que permitiría tener Cámaras de Compensación descentralizadas, condensadas en un smart contract (contrato inteligente) y que servirían para garantizar el cumplimiento de los acuerdos realizados entre traders independientes, que operan en una red que no hace parte de un exchange formal.